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La Iglesia no puede vivir y manifestar la vida de Dios, si la desconoce. Creemos que ese es el gran reto; se desconoce lo que ya fue revelado y consumado en Cristo Jesús. Conocer el propósito eterno de Dios y alinearnos a él, es crucial para que podamos madurar, ser efectivos y productivos, en tiempo real, como Iglesia. Conocer, abrazar, asimilar y vivir este glorioso Evangelio de amor, gracia y verdad, nos llevará a reinar en vida en todas las esferas. Es muy importante entender que el presente manual básico de discipulado, nunca sustituirá la Palabra de Dios. Este manual es solo una herramienta más, un guion, que le ayudará en este viaje hermoso y espiritual de continua formación del Cristo en nosotros, su revelación e iluminación de la verdad presente. En este estudio, descubrirá la plenitud de Cristo y sus riquezas espirituales. Descubrirá el poder y la sabiduría de Dios que mora en la Iglesia; Descubrirá a Cristo en nosotros, la esperanza de vida Abba padre

SERVIDORES O MINISTROS                        

     COMPETENTES DE UN                    NUEVO PACTO

 

Alguien dijo en una ocasión: “Que el que no sirve, no sirve”.  Cristo rechaza rotundamente este pensamiento contrario a la vida de Dios.  ¿Porqué? Simple:

 

 2 Timoteo 1:9-10 

“ Dios nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras,  sino según el            PROPÓSITO SUYO Y LA                      GRACIA

que nos fue dada en Cristo  Jesús antes de los tiempos de los siglos, pero que ahora ha sido manifestada por la  aparición de nuestro Salvador Jesucristo, el cual quitó la muerte y sacó a luz la vida y  la inmortalidad por el evangelio”

 

   ¡De acuerdo al            Padre Dios,                 TODOS                  SERVIMOS!         

  Servimos porque hay valor en su Iglesia. Como hijos de Dios, fuimos separados por él, para el servicio de él, establecidos en una competencia que proviene de él mismo y, para compartir la vida de Cristo con otros. La Palabra lo explica así.

 

 2 Corintios 3:4-14 

“Y tal confianza tenemos mediante Cristo para con Dios;

5 no que seamos competentes  (suficientes, fuertes) por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros   mismos, sino que nuestra competencia (suficiencia, plenitud o fortaleza) proviene de Dios, 6 el cual asimismo nos hizo ministros          (servidores)               competentes            (suficientes,               completos y          poderosos) de un nuevo pacto, no de la  letra, sino del espíritu; porque la letra mata

(la ley de Moisés),     

mas el espíritu        vivifica . 7 Y si el       ministerio de muerte grabado con letras en piedras fue con gloria,  tanto que los hijos de Israel no pudieron fijar la vista en el rostro de Moisés a causa de  la gloria de su rostro, la cual había de perecer, 8 ¿Cómo no será más bien con gloria  el ministerio                (servicio) 

del espíritu? 9 

Porque si el ministerio de condenación fue  con gloria, mucho más abundará en gloria el ministerio                       (servicio)

  de justificación. 10 Porque aun lo que fue glorioso, no es glorioso en este respecto, en  comparación con  La gloria más                eminente. 11 Porque si lo que perece tuvo

gloria, mucho más glorioso será lo que  permanece.

12 Así que, teniendo tal   esperanza, usamos de mucha            franqueza;

13 y no como Moisés, que ponía un velo   sobre su rostro, para que los hijos de Israel no fijaran la vista en el fin de aquello que         había de ser abolido. 14 Pero el entendimiento de ellos se embotó; porque hasta el día  de hoy, cuando leen el antiguo pacto, les queda el mismo velo no descubierto, el cual  por Cristo es  quitado” Una Iglesia compuesta de ministros            competentes del Eterno Pacto es una Iglesia apta, idónea entendida, hábil, capaz, perito, diestra conocedora, 

experimentada,      práctica, eficiente,  eficaz, sabia,          poderosa y que      posee autoridad    para llevar acabo    una encomienda.  Pero la clave de su competencia Es CRISTO. Pablo dijo 

Filipenses 4:13    “Todo lo puedo en Cristo que me  fortalece” Fuera

de Cristo, la  Iglesia NO puede  hacer nada  espiritual. Mira lo que dijo Jesús en su tarea de comunicar el mensaje el reino    a sus discípulos: 

 

        Juan 15:5  

“Yo (Cristo) soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él,  éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer Abba padre

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